Diversos estudios confirman, que una práctica deportiva continuada y adaptada a las condiciones físicas de cada persona, mejora la salud y reduce el riesgo de padecer ciertas dolencias y enfermedades.
Los beneficios de de caminata son múltiples destacándose su sencillez y bajo nivel de peligro para la tercera edad. Los beneficios de caminar para los adultos mayores son varios, entre otros disminuye la tensión arterial y aumenta la capacidad para captar oxígeno.
El baile ayuda a tener una buena condición física y favorece a que la mente se mantenga ocupada y se mejore el estado de ánimo, ya que mientras se baila se segregan endorfinas, las hormonas de la felicidad.
Practicar natación con regularidad en la tercera edad ayuda a prevenir problemas de tipo cardiovascular, mejora la circulación, permite una mayor movilidad que fuera del agua, tonifica, mejora la lumbalgia y los problemas relacionados con el equilibrio.
10 minutos de pedaleo diarios, previene de enfermedades cardiovasculares, ya que montar en bicicleta requiere un esfuerzo del corazón; de este modo, aumenta su capacidad y reduce la sensación de fatiga. Evita el sobrepeso, pues se que la grasa mala del cuerpo, más aún si se lleva una dieta adecuada de alimentación y fortalece los músculos.
Practicar aqua gym (gimnasia dentro del agua), mejora la condición cardiovascular mientras ejercita la fuerza y la resistencia muscular. También mejora la flexibilidad y los movimientos corporales, mejora la coordinación motriz global, ritmo y agilidad y reeduca la respiración. Además de todo esto, mejora y favorece la corrección de la postura y aumenta la relajación.
El yoga, favorece al aumento de la flexibilidad, mejora el equilibrio, ayuda al mantenimiento de la masa muscular y la respiración.
Por todo esto, es muy importante practicar deporte también en la tercera edad, y estas son algunas de nuestras recomendaciones.